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Para Precintia la seriedad y la seguridad son protagonistas en la producción.
Como fabricantes ayudamos a nuestros clientes para que solucionen sus problemas actuales. Entendemos que un precinto de seguridad es un elemento pensado, diseñado y probado para un fin concreto. Un precinto de seguridad requiere inversiones, estudios, pruebas y un compromiso de colaboración con el usuario. Esto está muy presente en nuestra fábrica.
El equipo humano trabaja desde la toma de decisiones hasta la ejecución a pie de máquina, para garantizar productos fiables en la entrega final:
- Cada operario/a recoge la orden de fabricación correspondiente, y una vez provista del material necesario para la producción, avisa al encargado para que prepare la máquina.
- Una vez preparada la máquina, se saca una primera muestra, de la cual se registran todos los parámetros y se entrega al departamento de calidad para realizarle los controles pertinentes.
- Durante la producción el /la operario/a realiza el autocontrol del proceso según la pauta que se encuentra en cada máquina. Al mismo tiempo el encargado realiza controles de la producción.
- Por último, la inspectora volante supervisará el pedido y el correcto registro de los diferentes parámetros.